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El Partido Comunista de Andalucía valora el resultado
producido ayer en Andalucía como “un serio aviso al Partido Popular como
respuesta de los ciudadanos a los recortes sociales, tanto los realizados como
los que están a punto de realizar, y a la reforma laboral que ya está
contribuyendo al despido de miles de trabajadores”.
Haber celebrado dos comicios electorales en tan breve
espacio de tiempo hace ver, para los comunistas, tendencias de voto objetivas y
alumbran causas difícilmente contestables, “El Partido Popular ha pasado de
obtener 1.982.000 y un 45,57% de voto el 20 de Noviembre, a 1.567.000 votos en
Marzo con un 40,6% de respaldo electoral.
Desde el PCA se preguntan qué ha ocurrido desde entonces
hasta aquí y la respuesta la encuentran rápidamente: “El Partido Popular ganó
las elecciones de Noviembre ocultando su programa y mintiendo descaradamente a
la población”, y continúan afirmando que “pocos meses después e incluso
habiendo atrasado los presupuestos para seguir ocultando la profundidad de los
recortes, la contestación en Asturias y especialmente en Andalucía ha sido
contundente y clara, este es el mejor indicio para garantizar el éxito de la Huelga General y
por lo tanto la derogación de la Reforma Laboral”.
Para el PCA “el Partido Popular ha sido la fuerza más votada
pero, incluso comparando sus resultados con los obtenidos en las elecciones
autonómicas de 2008, ha
perdido respaldo en términos absolutos en más de 150.000 votos. Los resultados
para el Partido popular y sus políticas son sencillamente “desastrosos” a
juicio de la formación comunista.
“En cuanto al voto socialista”, analizan, “las comparativas
con las anteriores elecciones autonómicas son una auténtica debacle dejándose
en el camino más de 750.000 votos y casi diez puntos porcentuales. Sin embargo
con respecto a las elecciones de Noviembre la caída es menor con una pérdida de
67.000 votos lo que le permite aumentar en tres puntos sus porcentajes.
Sin duda el resultado “más espectacular”, según el PCA, “ha
sido la subida de Izquierda Unida tanto en números absolutos como porcentuales.
Con respecto a las autonómicas de 2008 IULVCA aumenta 119.883 votantes pasando
del 7,06% al 11,34%. Incluso comparándolo con las últimas elecciones Generales
la subida es de más de 77.000 votos y tres puntos porcentuales”.
“En un primer análisis parece mostrarse como cierto que
somos la mejor garantía para detener a la derecha y ese mensaje ha calado,
cuanto mas sube IU peores resultados obtiene el Partido Popular”. Teníamos
razón cuando decíamos que la mejor manera de frenar al PP era un grupo fuerte
de la izquierda alternativa, de una Izquierda Unida que se ha convertido en un
voto especialmente útil para parar la marea azul popular han manifestado desde
el PCA.
Los motivos de estos resultados los sitúan en nuestro
compromiso con los trabajadores en activo y en paro, nuestra coherencia en
defensa de los servicios públicos y contra los recortes, nuestro decidido
impulso a la regeneración democrática y la ética como motor de las
instituciones públicas, y en el ingente trabajo a pie de calle que ha realizado
nuestra militancia y simpatizantes, han manifestado desde la formación
comunista andaluza. Y han continuado “Todo esto nos ha permitido contribuir de
manera decisiva a un resultado que debe servir para animar a aquellos que han
querido con su voto detener las injustas políticas de la derechona española a
que secunden la Huelga
General”.
Consideran desde el PCA que en el inmediato nos toca
transformar ese impulso de las urnas en movilización el próximo Jueves durante la Huelga general, que es la
manera democrática y constitucional de manifestar la opinión de los
trabajadores y trabajadoras ante la agresión más brutal que han recibido en la
historia.
Por último los comunistas andaluces quieren “felicitar al
conjunto de la militancia, de nuestros simpatizantes y amigos que han trabajado
mucho y bien en momentos especialmente difíciles para el conjunto de la
izquierda alternativa. Agradecer también su respaldo a los votantes que han
confiado en nuestra fuerza política”.
“Cada voto recibido supone un contrato con todos y cada uno
de ellos y ellas para realizar una política concreta y determinada que se
caracteriza por la defensa de los servicios públicos, especialmente en sanidad
y educación, el aumento de la fiscalidad para grandes empresas y fortunas para
no hacer recaer la crisis en los más débiles y la regeneración democrática de
la ética y la participación de la ciudadanía”.
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